Chaeli Mycro
ft es una sudafricana, de 21 años, que se define como activista por la capacidad. En silla de ruedas, por una tetraplejia, se ha convertido en la primera mujer que asciende al Kilimanjaro (http://elkilimanjaro.com), la montaña más alta de África.
La alpinista y su equipo (The Chaeli Kili Climbers) consiguieron alcanzar la cumbre tras cinco días de agotador ascenso. A la aventura de Chaeli Mycroft se apuntaron dos escaladores experimentados, dos mujeres de negocios, un fisioterapeuta, un cámara y un estudiante.
Las aventuras y desventuras pasadas por Chaeli Mycroft y su equipo pudieron ser seguidas, en tiempo real, gracias a los post que se iban publicando en el blog de la alpinista http://chaelicampaign.co.za/.
Para conseguir su objetivo, Chaeli Mycroft hizo uso 
de una silla de ruedas adaptada. Fabricada en materiales ultraligeros y construida con un diseño especialmente manejable, la silla fue conducida por dos miembros del equipo de Chaeli Mycroft .
Conseguir pisar la cumbre del Kilimanjaro no fue, en absoluto, una tarea fácil para Chaeli Mycroft. En realidad, fue la culminación de una aventura que ha llevado tres años de preparación. Una de las pruebas preparatorias por las que hubieron de pasar, durante meses, todos los participantes fue el entrenamiento en una cámara de altitud simulada. Esto permitió al equipo de trekking acostumbrarse a la falta de oxígeno. Según declaró la propia Chaeli Mycroft “te acostumbras a respirar de otra manera”
Diagnosticada de parálisis cerebral a los 11 meses de edad, Chaeli Mycroft ha pasado toda su vida en una silla de ruedas… lo que no le ha impedido ser una persona extremadamente luchadora, activista de toda clase de causas. Por ejemplo, Chaeli Mycroft fue cofundadora, junto con una de sus hermanas y un grupo de amigas, de una ong que asiste a más de 5.000 niños discapacitados de toda Sudáfrica. Les proporcionan de todo, desde sillas de ruedas y terapias ocupacionales a programas educativos. El famoso arzobispo sudafricano Desmond Tutu es un ferviente fan de la asociación.
Conocido como El Techo de África, la ascensión del Kilimanjaro por parte de Chaeli Mycroft, y sus compañeros, ha requerido del entrenamiento de aptitudes y conocimientos especiales, capaces de cubrir las especiales demandas del cuerpo de la alpinista. Por ejemplo, su cuerpo sufre de descensos repentinos de temperaturas, de hipotermias, de las que el equipo ha aprendido a sacarla en menos de tres minutos.
Conseguido el objetivo, 
Chaeli Mycroft quiere dejar claro su mensaje “nuestro objetivo no es sólo que debamos superar nuestras montañas psíquicas. Lo que queremos decir es que, trabajando juntos, podemos lograr cosas épicas”
PEPE VARELA
